El partido hubiese sido otro si Pedro acierta en la primera ocasión de gol. El tinerfeño recogió una asistencia de Villa y envió el esférico al travesaño ante la salida del meta local. El Barça seguía agobiando a un Rubin que formó un muro defensivo, con un 6-2-2 (todos ellos en su área) que impedía a los culés combinar con facilidad. Pese a que los rusos renunciaron al ataque, se encontraron con un penalti a su favor propiciado por un mal despeje de Valdés y la precipitación de Alves. Noboa no falló y el encuentro se ponía aún más cuesta arriba para los intereses catalanes, que continuaron errando oportunidades con Pedro, Piqué y Villa como principales protagonistas.
En el 60', un derribo a Iniesta dentro del área provocó un nuevo penalti que Villa no desaprovechó. El tanto 400 de los blaugranas en Copa de Europa y la posterior entrada de Messi al campo ofreció un punto más de velocidad al juego culé que hizo recular, más aún, al conjunto ruso. Alves, Messi, Bojan tuvieron el 1-2 y Martins se topó con la madera en la única llegada local del segundo tiempo. A pesar del susto, los de Guardiola no se conformaron con el empate y buscaron el gol de la victoria hasta el pitido final. De hecho, en el añadido Iniesta pudo dar el triunfo pero no supo finalizar una prodigiosa triangulación con Leo en el área.
El Barça regresa con un punto valioso a la vez que agridulce, tras no haber podido derribar, por tercera vez, el muro de Kazán.
1 - Rubin Kazán: Ryzhikov; Kaleshin, Salukvadze, César Navas, Bocchetti, Ansaldi, Ryazantsev, Murawski, Noboa (Natcho, min.88), Karadeniz (Martins, min.65) y Kornilenko (Sibaya, min.62).
1 - Barcelona: Valdés; Alves, Piqué, Puyol, Maxwell, Mascherano (Messi, min.61), Xavi, Sergio Busquets, Pedro, Iniesta y Villa (Bojan, min.86).
Goles: 1-0: Noboa (p.), min.30. 1-1: Villa (p.), min.60.