Los deberes de Txiki

La secretaría técnica azulgrana con Txiki Beguiristain al frente no han hecho sus deberes.
Pocos días después de consumarse el triplete la directiva insinuó que la planificación para la temporada siguiente ya estaba elaborada y que los futuros fichajes estaban avanzados.

Pues sí, tenían razón. Sylvinho acabó contrato y la primera opción para reforzar el lateral izquierdo era el deportivista Filipe Luis... agua! El sustituto de Eto'o sería Villa... agua, otra vez!
¿A qué se referían cuando aseguraban tener planificado el equipo 2009-2010? Menos mal que dieron por casualidad con el representante de futbolistas Mino Raiola, el cual les ofreció la posibilidad de incorporar al brasileño Maxwell por una cantidad razonable y de paso a Zlatan Ibrahimovic. No se pueden considerar grandes fichajes de la secretaría técnica ya que el traspaso del delantero sueco lo podía negociar "la portera de Núñez" y el del lateral es un segundo plato, después de no poder incorporar al principal objetivo.

Según Pep Guardiola aún faltan piezas para cerrar la plantilla; central, mediocentro y extremo izquierdo son las tres posiciones que el míster desea reforzar. ¿Qué hace Txiki Beguiristain? Pues durante la temporada se ha limitado a seguir los partidos del Barça, acudiendo a todos los desplazamientos y viendo los partidos en la grada, en vez de observar la progresión de jugadores jóvenes o poco conocidos por el mundo y negociar futuras incorporaciones para completar el equipo. Si finalmente llegan más fichajes, el club acabará pagando con demasiados millones de euros el trabajo que no ha sabido hacer a tiempo su director técnico.

Txiki no ha hecho bien los deberes y ahora tendrá que recuperar el tiempo perdido, se acercan los primeros exámenes y él no los ha preparado.