domingo, 19 de julio de 2009

Hoy hace 6 años…


Ronaldinho fichaba por el Barça. Eran las 17.15 horas de la tarde de aquel 19 de julio de 2003 cuando el crack brasileño aterrizaba en el aeropuerto del Prat. Allí le esperaban Sandro Rosell, Ferran Soriano y miles de aficionados blaugranas que celebraban su llegada como si de un título se tratara. El acuerdo estaba casi hecho, pero no fue hasta pasadas las 22h cuando terminó la reunión definitiva, entre Joan Laporta y el resto de la cúpula directiva por un lado y Roberto de Assis junto con el propio Ronaldinho y sus abogados por el otro, y el crack estampaba su firma en el contrato.


El Club pagó 25 millones de euros (5 más en función de variables) al Paris Saint-Germain por su traspaso. El contrato se selló por 5 temporadas a razón de 3 millones de euros netos, más incentivos, por cada una de ellas. La directiva puso así punto y final a lo que fue “el culebrón del verano” ya que Ronnie era deseado también por el R. Madrid y el Manchester United.
Ronaldo Assis Moreira, Ronaldinho, nacido en Porto Alegre (Brasil) el 21 de Marzo de 1980, mediapunta/extremo izquierdo de técnica depuradísima, rápido, potente y con una habilidad fuera de lo común que le permiten realizar todo tipo de acrobacias con el balón en sus pies. “El Gaúcho” comienza su carrera deportiva en el Gremio de Porto Alegre y en enero de 2001 ficha por el PSG francés donde descubre el futbol europeo. Tras 2 temporadas algo irregulares pero con destellos de crack, el Barça decide apostar por él… Una gran apuesta, sin duda.


5 temporadas en las que conquistó 2 ligas, 1 Copa de Europa, 2 Supercopas de España, 1 Balón de Oro y un sin fin de distinciones individuales que le consideraron durante 2 años consecutivos como el mejor jugador del mundo.


El barcelonismo nunca olvidará su llegada, sus genialidades, sus goles, su sonrisa ni su saludo surfero. Por desgracia tampoco olvidará su marcha; tras una última temporada para olvidar a nivel colectivo y sobretodo a nivel individual, Ronaldinho se marcha a Milán, el pasado verano, por la puerta de atrás (por la que se suelen marchar los grandes futbolistas en el Barça) dejando 24 millones de euros en las arcas del club y la sensación de haber dilapidado su carrera profesional.
Hoy nos quedamos con la imagen de su recibimiento y la alegría que provocó en la afición culé.

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